Se trata de un varón de 86 años que acude por debilidad en ambos miembros inferiores de 10 horas de evolución con tres caídas posteriores, sin traumatismo craneoencefálico ni pérdida de consciencia. Refiere disminución de fuerza y sensación de inestabilidad mayor en el miembro inferior derecho. Aumento de base de sustentación. El clínico ruega pues descartar lesión cerebral aguda.